TRAUMAS QUE SE LIBERAN
Las personas llevan en su ADN una herencia genética común. Y
como todas vibramos en nuestra aura, tenemos un constante campo que emite
movimientos. Estos fluctúan, por ello tienen colores. Que determinan el estado en ese momento, o
permanente. Lo bien cierto es que interactuamos. Con las personas, con el medio,
y a veces de forma traumática.
todo esta en evolución patrón geométrico |
Todas las personas tienen programas inconscientes, que están
en nuestra psique. Y que no sabemos que tenemos. Pero que en cualquier momento
se pueden activar. Ahora se habla mucho de la crisis y de sus efectos. De la
decodificación. En realidad la crisis
fisiológica o psicológica (emocional) es sacar un problema, emergerlo para
sanarlo. Por ello hace crisis, y se rompe, desaparece.
Por este flujo de energías, con las que interconectamos
continuamente, a veces salen. Muchas de ellas se han gestado incluso antes del
momento del nacer. Ha dejado una importa celular, lo que nuestra madre sintió.
Y si fue, algo que tuvo un impacto, puede aflorar en este momento. Va asociado
a veces, a alguna causa externa. Y su origen es desconocido para la ciencia,
puede ser una alergia o un algía, en algún órgano…Esto está para avisar, que hemos llegado a una
fase en que debemos eliminar esta situación.
estrella de ocho puntas- vehiculo |
Se puede mediante una meditación guiada, y en el momento que
la persona recuerda el origen, el impacto emocional. la técnica es rápida. Es una técnica sencilla y muy
contundente. Todas las personas
arrastran traumas, es normal. El problema al abordarse, desaparecer y liberar los traumas es
importante.
Al nacer, es muy frecuente tener el trauma de nacimiento, por la química en la inducción al parto, por que
el parto haya sido complicado, o por causas diversas. Hay hijos no deseado. Y
de lo que no cabe duda es que el ser al nacer,
lo sabe, lo siente. A veces se desea un niño y nace una niña. Aun que lo sepan…lo
expresan. Y aun que luego digan pero le hemos querido igual. Sí, pero esa primera
expresión, decepción o incluso rechazo, hacen que la persona lo registre y lo
arrastre todo una vida.
La mayoría de traumas proceden de la infancia. Pero no
todos, claro. Hay hechos recientes o no tanto, como una pérdida o una
separación permanente, que han dejado una profunda huella. Y debemos vivir en
presente, liberarnos de estas cargas. Son fardos, lastres, que nos enferman,
nos atrapan y tenemos conductas
inapropiadas, enfermedades que no sanan. De unos traumas somos conscientes, y de otros no.
Parece increíble que en una sesión o en una cuantas, se
pueda eliminar un problema, de todo una vida. Pero si se va al la fuente, al
origen, es de este modo. Pero es así, y sucede
porque al liberar la energía retenida, el efecto desaparece, de forma
permanente. Se puede trabajar incluso a distancia. Pero a mí me gusta más, que
la persona experimente, y sienta el cambio. Viva la sensación de bienestar.
Neus
Pont
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